¿ LLegó el sicariato a la República Dominicana ?

Mi opinión Sandy de la Rosa

La Policía al parecer es el único cuerpo que pelea contra el sicariato en la República Dominicana, faltando otras instituciones que se incorporen contra este flagelo que día a día ciegan las vidas de hombres y  mujeres en el país.

Semana tras semana, el número de asesinatos que se producen en todas partes del país aumenta, en especial en barrios y sectores, en donde el mes anterior se descubrió que una banda utilizaba el chantaje con grabaciones en moteles o cabañas.

La ciudadanía está aterrada. De pronto, en la República Dominicana ha pasado a integrar la nómina de naciones en la que el narcotráfico se expande.

Las cifras de capturas de droga dan cuenta de este negocio ilícito, vinculado a la violencia y al crimen y que ha llegado a provincias en las que nunca antes habían operado.

Lo más reciente ha sido la captura de dos de tres presuntos delincuentes, integrantes de una peligrosa banda que se dedicaba a asesinar personas por encargo (sicariato), atracos, robos, entre otros delitos, que cayeron abatidos el pasado sábado durante una refriega a tiros con agentes de la Dirección Central de Inteligencia Delictiva (DINTEL), quienes trataron de apresarlos en el ensanche Kennedy, de esta capital, ocupándole distintas armas de fuego, incluyendo un fusil M-16, y otros pertrechos militares.

Tal y como evidencia el aumento de este negocio, creemos que debe ser combatido por todos los medios existentes.

Ante la reacción de los ciudadanos, las autoridades, comenzando por el fiscal y luego por el jefe de la Policía, han anunciado combatir con más fuerza el castigo de este crimen, debemos apoyar estas iniciativas pero también imponer controles para el ingreso de ciudadanos del extranjero.

Con el control de ingresos de extranjeros al país y las maniobras que realizan en la Policía con sus unidades especiales, equipos de élite para detener el sicariato, vinculado al tráfico de estupefacientes creemos que se podrán combatir estos males.

Está bien que se actúe, pero que se incorporen otras instituciones para combatir este mal.